TEXTO DE LA HISTORIA
Un carro se había estacionado en la esquina. Diana se había subido y luego de negociar el precio por una mamada de no mas de unos quince minutos el hombre al volante encendió el auto nuevamente y fue a un callejón cercano que Diana le había indicado. Una vez allí él se bajo los pantalones y ella se acomodo, se recostó sobre sus muslos, tomó su verga y comenzó a estimularla. Cuando estuvo lo suficientemente dura comenzó a mamársela se la metió y comenzó a chupársela lentamente haciendo que se pusiera mas dura aun, pasaron unos segundos y la verga estaba completamente venuda y Diana ahora la chupaba con mas confianza y velocidad.
Y cuando iba a venirse Diana se iba a quitar pero el hombre no la dejo al sostenerle la cabeza para que su semen entrara a su boca velozmente y si bien Diana sintió asco y quiso retirarse no podía hacerlo, la posición que tenia no le dejaba hacer fuerza, además de que este hombre era mucho mas fuerte que ella. Diana estaba desesperada, seguía tratando de luchar pero de la nada su visión se puso borrosa, Diana perdió la conciencia unos segundos y cuando la recobró todo lo veía mucho mas brillante, era todo muy extraño. El sol le daba en los ojos y a duras penas reconocía el mar, Diana no sabía que estaba pasando ni donde estaba.
Diana estaba un poco mareada por la altura, tenia vértigo y casi se cae de para atrás por lo que se tuvo que sostener y respirar profundamente para no perder el equilibrio por más tiempo, trato de controlarse lo mas que pudo pero de todas maneras le costo unos minutos. Durante esos minutos a duras penas se enfoco en la hermosa vista que tenia ante sus ojos.
Ella una mujer que toda su vida la había vivido en una parcial miseria y que había que tenido que rebuscarse un lamentable pero digno trabajo satisfaciendo a los hombres ahora había sido elegida por el cambio universal para tener una nueva oportunidad. La pobre mujer que estaba siendo abusada por un pervertido ahora la vida le había sonreído.
Diana estaba confundida, no sabia donde estaba, ni quien era, ni que había sucedido. Aun estaba asustada de lo que estaba viviendo hace pocos segundos a tal punto que hasta se sonto en una silla que había a sus espaldas a llorar.
Cuando por fin se calmo Diana le dio curiosidad todo lo nuevo que le había pasado asi que recorrió todo el departamento y se dio cuenta que estaba sola. Y cuando termino se vio al espejo y no lo podía creer…
Diana se quedó paralizada frente al espejo, incapaz de procesar lo que veía. La mujer que la miraba de vuelta no era la misma que había sido minutos antes en aquel callejón. Su reflejo mostraba a una mujer joven, hermosa, con un cuerpo esbelto y un rostro que parecía sacado de una revista de moda. Era como si hubiese sido transportada a otro cuerpo, a otra vida.
La incredulidad pronto se transformó en una emoción oscura y poderosa: la oportunidad de dejar atrás la vida miserable que había conocido. Sin embargo, la bondad que alguna vez había existido en ella, la compasión por otras almas perdidas, fue reemplazada por una ambición desenfrenada y una crueldad que nunca había sentido antes.
Mientras exploraba el lujoso departamento, Diana descubrió los vestigios de la vida anterior de la mujer cuyo cuerpo ahora habitaba. Ropas de diseñador colgaban en el armario, joyas costosas reposaban sobre una mesilla, y fotografías enmarcadas mostraban a la mujer sonriente junto a un hombre mayor, evidentemente rico y poderoso.
Con una sonrisa torcida, Diana comprendió el alcance de su nueva vida. Esta mujer había sido una figura de privilegio, admirada y envidiada. Ahora, todo eso le pertenecía a ella. La vieja Diana había desaparecido; en su lugar estaba ella…
Diana, ahora desde ese momento se convertiría en una mujer dispuesta a hacer cualquier cosa para mantener esta nueva identidad, para aprovechar al máximo cada momento de esta vida robada.
Sin perder tiempo, comenzó a adaptarse a su nueva existencia. Revisó los contactos en el teléfono de la mujer, haciendo llamadas y enviando mensajes con una destreza que sorprendió incluso a ella misma. Pronto, supo todo lo que necesitaba saber: la mujer cuyo cuerpo había tomado era la esposa de un magnate financiero, un hombre que estaba fuera del país por negocios.
El primer paso de Diana fue asegurarse de que nadie sospechara el cambio. Aprendió a imitar los gestos, la voz y las costumbres de la mujer. Asistió a eventos sociales, deslumbrando a todos con su belleza y su recién descubierta seguridad. Aquellos que alguna vez habían subestimado a la mujer por su juventud pronto se encontraron temiendo su astucia.
Sin embargo, la oscuridad dentro de Diana no se detuvo allí. La mujer que una vez había sido explotada y maltratada por hombres ahora se deleitaba en devolver el sufrimiento con creces. Utilizó su posición para arruinar a aquellos que alguna vez la habían despreciado.
Poco a poco, Diana consolidó su poder. Nadie podía detenerla; su marido la adoraba y sus enemigos temían incluso pronunciar su nombre. La joven mujer que había comenzado como una simple prostituta, vendiendo su cuerpo por necesidad, ahora reinaba como una figura de terror y deseo en un mundo que nunca hubiera imaginado alcanzar.
Al final, Diana no sintió ni una pizca de remordimiento. La vida le había dado una oportunidad, y la había tomado con ambas manos, sin importar a quién tuviera que destruir en el proceso. Ella había triunfado.
Hola ya te puse la historia que quería no se si la quieras hacer
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